MANIFIESTO DE COVARRUBIAS
Castilla
vive en nosotros, los que hoy nos hemos reunido en Covarrubias, ante la tumba de
Fernán González. Algunos de nosotros somos socios fundadores de Comunidad
Castellana, todos nos consideramos herederos del camino recorrido por aquella
asociación cultural-regionalista, camino que queremos continuar.
En este mismo lugar de Covarrubias, junto a la
tumba de Fernán González, nació Comunidad Castellana. Un Grupo de castellanos de
diversas tierras y comarcas, reunidos en comunidad, se proponían como objetivo
esencial:
“la recuperación cultural,
cívica y material del pueblo castellano; el reconocimiento, afirmación y
desarrollo de la personalidad de Castilla como entidad colectiva en el conjunto
de los pueblos y países españoles; y la promoción de los intereses y valores de
Castilla y de todos los pueblos, comarcas y tierras que la integran”.
El CENTRO DE ESTUDIOS
CASTELLANOS
es una
forma renovada de hacernos presentes en la
cultura y en la sociedad actual, con los medios que nos ofrecen las nuevas
técnicas de comunicación. No queremos que aquel importante acerbo de ideas,
discursos, escritos y publicaciones, sentimiento y trabajo por la afirmación de
la identidad castellana en los años de la Transición política y afirmación
democrática, se vayan olvidando poco a poco, para pasar en el mejor de los casos
a polvorientas estanterías cuando no al contenedor; queremos hacer surgir
una nueva generación deseosa de tomar el
relevo en la afirmación y defensa de Castilla. Nuestro propósito es difundir
aquel mensaje y seguir haciendo estudios y acciones de todo tipo para la
concienciación del pueblo castellano, de manera que pueda ser cada vez más
protagonista de su futuro.
Han pasado más de treinta años de la España de
las Autonomías, y es tiempo de revisión para ver lo que se hizo mal, corregir
excesos de los nacionalismos cada vez más en el resbaladero del separatismo,
buscar un mejor equilibrio entre la legítima afirmación de la propia identidad y
la necesaria solidaridad en la unidad de España. Esto es, hoy día, un clamor
general.
Castilla
no fue respetada en su identidad ni en su territorio por la España de las
Autonomías, no fue reconocida toda y sola ella como una Comunidad Histórica.
Santander o La Montaña se constituyó en comunidad uniprovincial con el nombre de
Cantabria; igualmente Logroño, con el nombre de La Rioja. Ávila, Burgos, Segovia
y Soria fueron integradas en una Comunidad llamada Castilla y León; y las
tierras castellanas al sur de la cordillera central, fueron integradas en
Castilla-La Mancha, excluyendo Madrid, capital y provincia, que conformaron otra
comunidad uniprovincial.
Castilla
quedaba, así, dividida en cinco trozos.
En el momento actual, se levantan voces
clamando por la revisión del Estado autonómico. Piden “reordenar el modelo
autonómico” y “evitar la destrucción de la unidad estatal”. Y esto, no sólo por
necesidad económica, sino por la propia supervivencia de nuestra
democracia que necesita conjugar mejor
los principios de autonomía y solidaridad, y
salvaguardar la libertad y los derechos humanos.
En lo que se refiere a la reordenación
del modelo autonómico, el CENTRO DE ESTUDIOS CASTELLANOS quiere levantar su voz
por el reconocimiento de Castilla sin divisiones, mezclas ni confusionismos.
Castilla tiene derecho a formar una comunidad autónoma que siguiendo la
tradición castellana, podría tomar la forma de una Mancomunidad de Diputaciones
Forales. Toda y sola Castilla. (León, es otra realidad histórica; al igual que
Toledo-La Mancha). El resultado de este reconocimiento de Castilla, nos
llevaría, por otra parte, a reducir el número de comunidades autónomas.
El CENTRO DE ESTUDIOS CASTELLANOS, grupo
privado y ajeno a cualquier adscripción partidaria o gubernamental, sólo busca
el bien común del pueblo castellano, y su reconocimiento en igualdad con los
otros pueblos de España, sin marginaciones ni privilegios. En Castilla es un
principio irrenunciable, que
“nadie es
más que nadie”. Esta igualdad de derechos de todas las regiones o
nacionalidades, no quiere decir uniformidad, lo cual sería “contra
natura”.
El CENTRO DE ESTUDIOS CASTELLANOS no acepta la
sumisión fatalista de nuestro pueblo, tampoco busca la rebelión callejera, sólo
quiere ser un lugar de encuentro en el que soñar el futuro desde el conocimiento
de nuestra historia y nuestra cultura, desde la razón y
el sentimiento.
Para ello, nace el CENTRO DE ESTUDIOS
CASTELLANOS, Centro de Estudios y Lugar de Encuentro.
En Covarrubias, ante la tumba de Fernán
González, 15 de junio de 2013.